un ataque de la OTAN en sus fronteras activá la nueva doctrina nuclear rusa

Estas declaraciones complementan a las del Kremlin, que ya advirtió de que ese cambio de paradigma es una «señal definitiva» a los países occidentales para disuadirles de cualquier intento de apuntar sus objetivos hacia Rusia y sus aliados. 

Putin confirmó que su país consideraría el uso de armas nucleares si fuera atacada por cualquier Estado con armamento convencional. El presidente ruso amenazó directamente a la OTAN asegurando que si recibía «información fiable» de un ataque masivo en su territorio recurriría a su arsenal. 

Estas palabras coinciden con la presencia de Ucrania en la Asamblea General de la ONU, donde continúa solicitando misiles de largo alcance. El jefe de gabinete de Zelenski respondió a este «aviso» considerándolo como un mero intento de chantaje nuclear.

Rusia confirmó en 2023 que Bielorrusia ya había comenzado a recibir armas nucleares de su país vecino, aunque no revelan el lugar exacto. Además, este arsenal pertenece todavía al Kremlin, que junto al gobierno de Lukashenko ya han iniciado «la segunda etapa» de los ejercicios de sus fuerzas nucleares tácticas, que incluye el entrenamiento conjunto.