Internacionales Trump culpa a Harris y Biden de alimentar la «retórica» que provocó su nuevo intento de asesinato 8 minuto leer Comentarios desactivados en Trump culpa a Harris y Biden de alimentar la «retórica» que provocó su nuevo intento de asesinato 0 Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir en Google+ Compartir en Reddit Compartir en Pinterest Compartir en Linkedin Compartir en Tumblr No ha pasado ni un día desde el segundo intento de asesinato en esta campaña electoral contra el expresidente Donald Trump cuando las consecuencias de este ataque ya se han convertido en un tema más de la campaña electoral estadounidense. El republicano ha acusado este lunes al presidente Joe Biden y a su numero dos, la candidata demócrata Kamala Harris, de alimentar la retorica que ha llevado este domingo al sospechoso, Ryan Wesley Routh, a querer acabar presuntamente con su vida en un campo de golfo de Florida. «Su retórica es la que está provocando que me disparen, cuando yo soy el que va a salvar al país, y ellos son los que están destruyéndolo, tanto desde dentro como desde fuera», ha afirmado el magante a la cadena Fox News Digital, a la que ha manifestado que Routh «actuó» sobre la base de un «lenguaje altamente incendiario» de los demócratas. Trump señaló los comentarios en los que se le tachaba de «amenaza para la democracia» como una forma de «llamar al enemigo desde dentro». «Ellos son la verdadera amenaza», ha dicho el expresidente. Por su parte, Julie Chávez Rodríguez, jefa de campaña de la candidata demócrata, ha contestado en una entrevista con EFE que es la «retórica divisiva y peligrosa» del exmandatario republicano la que está teniendo «consecuencias reales» en Estados Unidos. Ejemplo de ello es Springfield (Ohio), donde se han sucedido amenazas de bomba con desalojo de escuelas y edificios gubernamentales después de que Trump lanzara el bulo durante el debate electoral que acusaba a los inmigrantes haitianos de esa localidad de comerse a los «perros» y «gatos» de los vecinos. El segundo intento de asesinato al candidato republicano se produjo sobre las 13.30 hora local (17.30 hora peninsular española) del domingo y fue evitado después de que agentes del Servicio Secreto vieran y dispararan a un hombre con un arma detrás de una de las vallas del campo de golf. El presunto autor tenía un rifle AK-47 con mira telescópica, una cámara GoPro y dos mochilas. Tras el disparo del Servicio Secreto huyó del lugar, pero fue detenido en la autopista I-95 después de que un ciudadano fotografiara la matricula de su coche. El Servicio Secreto se reúne con Trump Aunque en los primeros instantes la información era confusa y se pensó que los disparos procedían de un tiroteo que no tenía relación con el expresidente, rápidamente el FBI trató el suceso como un intento de asesinato contra Trump. Como ya ocurrió hace dos meses cuando una bala rozó la oreja de Trump durante un mitin en Butler (Pensilvania) provocando un caos que terminó con el tirador muerto a manos de las fuerzas de seguridad, los primeros señalados por el suceso de este domingo han sido los miembros del Servicio Secreto. Diez días después del atentado de Butler la entonces directora del Servicio Secreto, Kimberly Cheatle, dimitió tras admitir errores en el despliegue de aquel mitin. Por el momento no parece que el futuro del actual director interino, Ronald Rowe, vaya a correr la misma suerte. Con todo, este lunes Rowe se ha desplazado a Florida «indefinidamente» hasta que concluya la investigación. En una entrevista con CNN, el portavoz de Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, ha confirmado que Rowe se reunirá con Trump y con miembros de la policía local que participaron en la detención. Además, el director interino ha recorrido el Trump International Golf Club de West Palm Beach donde se produjeron los hechos para analizar qué pudo pasar para que el sospechoso consiguiera acceder hasta la zona en la que se instaló para disparar al expresidente. Mientras tanto, Ryan Wesley Routh ha pasado este lunes a disposición judicial y ha sido acusado de cargos federales relacionados con armas de fuego. El sospechoso ha comparecido ante un tribunal federal de West Palm Beach, al que acudió esposado y con un uniforme de reo. Además, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció este domingo que su estado también llevará a cabo su propia investigación. «La gente merece saber la verdad sobre el posible asesino y cómo logró acercarse a menos de 500 metros del expresidente«, escribió en redes sociales. Link de la Fuente Comparte esto:Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva) Relacionado
