Inicio Opinión el lado B de la bicicleta, el cepo y la gestión secreta de Luis Caputo

el lado B de la bicicleta, el cepo y la gestión secreta de Luis Caputo

10 minuto leer
Comentarios desactivados en el lado B de la bicicleta, el cepo y la gestión secreta de Luis Caputo
0

[ad_1]

Los dólares no aparecen. Son u$s15.000 millones que busca el Gobierno. Considera que esa es la cifra mínima necesaria para no correr riesgos a la hora de levantar el cepo. Con todo, es probable que ni siquiera esa cifra sea la correcta. Aquí y allá se acumula la deuda comercial con importadores como contrapartida de los dólares que supuestamente logra ahorrar el Banco Central. Lo mismo ocurre con los compromisos informales que el BCRA ha tomado con aquellas empresas y entidades que quieren girar dividendos al exterior. Hay lista de espera.

Si los dólares no aparecen, es porque el FMI no ha dado el visto bueno para un desembolso. Se calcula que son, al menos, u$s5.000 millones que quedaron pendientes -ya aprobados- de los primeros meses del mandato de Alberto Fernández.

dolar-blue-inversiones-finanzas-mercados-vivo.jpg

Los dólares, la preocupación del Gobierno.

Los dólares, la preocupación del Gobierno.

Depositphotos

El expresidente había pedido al FMI que no quería recibir ese desembolso para no seguir engordando la deuda con el organismo. Para el ministro Luis Caputo, son esos mismos recursos los que ahora deberían ser susceptibles de ser girados al país por parte de Georgieva. En el FMI piensan de otra manera.

Digamos que ya llegan los dólares, shhh

En los últimos días el Gobierno ha puesto en marcha una campaña. Le hace decir a sus voceros que la inyección de dólares es inminente. Incluso el propio presidente se encarga de difundirlo. Se supone que, al margen del FMI, hay fondos de inversión que podrían ingresar unos u$s 5.000 millones adicionales. A eso se sumaría otro tanto de grandes empresas con actividad en el país que deberían liberar inversiones. También de países amigos que podrían ingresar millones.

Pero la realidad teje otra trama y conviene atenderla. En los últimos meses algunos fondos de inversión han ingresado dólares con la finalidad de invertir en pesos a tasa. Se lo permite la bicicleta financiera del ministro Caputo, que dispone una devaluación del 2% mensual para “asegurar” una tasa en dólares atractiva. En ninguna parte del planeta esos fondos de inversión tendrían garantizado ese rendimiento. Pero todo tiene un fin.

luis caputo

Reuters

Esos fondos de inversión van a pedirle al ministro una ventana para poder cristalizar su inversión. Dicho en criollo, pasarse de pesos a dólares ni bien se pueda. Lógico, con reservas en el Banco Central que aún resultan negativas, el Gobierno espera la liquidación del campo para pagarle a los fondos de inversión en el escritorio. El FMI lo sabe.

En su última visita a la Argentina, el director para el hemisferio occidental Rodrigo Valdés planteó sus dudas de forma encriptada. El organismo pareciera percatarse de algo: si el FMI le girara esos u$s 5.000 millones al país, ¿acaso el ministro Caputo no los terminaría utilizando para “pagarle” a los fondos de inversión que vinieron a realizar la bicicleta financiera? Las sospechan anidan en Washington desde hace tiempo. No por nada, la propia Georgieva parece encargarse personalmente de la cuestión.

El FMI espera que el Gobierno haga la tarea primero

Así se entiende lo que ocurre cada vez que el FMI se acerca al caso argentino. Le pide al Gobierno la “sustentabilidad” del plan, es decir, le pide que los recursos sean destinados a “consolidar” la estabilización de la economía y el frente financiero.

Por supuesto, el FMI quiere consolidar el ajuste que está llevando adelante el Gobierno, pero no confía en el método elegido para mostrar los superávits gemelos. Le solicita públicamente a Caputo que cambie esa receta por otra. Que asegure que los recursos que el Gobierno tiene disponibles sean inyectados en los hogares de menores recursos para que no haya peligro de estallido social y puedan consolidarse las reformas.

Se entiende así también la extraña mecánica del presidente Milei, que envía a sus ministros a negociar con gobernadores un potencial acuerdo político para llevar adelante las leyes que necesita, pero al mismo tiempo, no puede evitar confrontar e insultar con “la casta” para no perder capital político.

Javier Milei Kristalina Georgieva FMI.jpeg

Es el FMI el que le pide a Milei que consolide con leyes las reformas en marcha a través del Congreso porque no confía en el plan en marcha. Sólo de esa forma, respaldaría el derrotero que marca el plan económico y podría liberar los u$s5.000 millones que necesita el Gobierno para pagarle a los fondos de inversión, aunque no serviría para levantar el cepo.

Mientras tanto, en toda esta historia, los dólares del campo irán, en parte, a pagarle la tasa de interés a los fondos que ingresaron hace algunas semanas. Esa es una explicación, entre otras, al encarecimiento de la Argentina en dólares y a la “demora” en cambiar la estrategia de devaluación al 2%. ¿Le conviene al Gobierno devaluar el peso? Pareciera que no. Le recortaría “tasa” a los fondos que están invertidos en pesos y que quieren salir.

Por otro lado, tampoco le conviene devaluar antes de comprarle los dólares al campo. Necesita emitir la menor cantidad de pesos para poder quedarse con la mayor cantidad de divisas. Al revés no le sirve. Pero el campo se lo está pidiendo.

[ad_2]

Link de la Fuente

Cargue Artículos Más Relacionados
Cargue Más Por Mundo Político
Cargue Más En Opinión
Comentarios cerrados

Mira además

Diputados provinciales expresaron su orgullo por los logros de Quimsa

[ad_1] La Legislatura destacó el título conseguido por el equipo fusionado, que se quedó c…